Y entre bramido de aliento
que arde en mi boca y calcino
con paladar tan sapino
hace al corazón violento.
Con la mano yo sostengo
la fuerza de su latido
que desgarra hasta la entraña
mientras beso es ingerido.
Y su murmullo atabala,
chilla medroso a mi oído
y mi cuerpo ya caído
el amor rabioso exhala.
¡Que vengan néctar de amores
tus besos tan vengadores,
que mi lengua con destreza
tendrá la pura certeza
de amarlos con mil sabores!
C.ROMÁN.( © Derechos Reservados )
No hay comentarios:
Publicar un comentario